A los quince años quiso entrar al convento como lo habían hecho sus hermanas Paulina, Leonia y María pero por la edad, el obispo de Bayeux no le dio permiso. Más tarde, en una peregrinación a Roma por el jubileo sacerdotal del Papa León XIII, Teresita le pidió permiso al Papa y le dijo que si era la voluntad de Dios asi seria. Con el apoyo del Papa, logró entrar en el Carmelo el 9 de abril de 1888. Teresita procuraba ser muy sencilla y hacer perfectas las cosas pequeñas.
“Después de mi muerte derramaré una lluvia de rosas para ayudar a quien lo necesite”. Muchos milagros fueron hechos gracias a su intercesión, han atraído la atención de los cristianos del mundo entero.
Teresita murió a los 24 años. El Papa Pío XI la declaró santa en 1925 y junto con San Francisco Javier, fue patrona de las misiones. El Papa Juan Pablo II le declaró “Doctora de la Iglesia” en 1997.
Puedes seguir el novenario en Rincón de la Esperanza
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por dejar tu comentario.